¡Next!


Con la posmodernidad esperar se volvió incómodo. Los métodos abreviados, los accesos y excesos de atajos, las gratificaciones instantáneas y las mercancías en liquidación de la barata de julio, muestran al mundo tanto volátil como vertiginoso. La sobre estimulación del deseo conlleva a querer acumular “objetos” sin demora, y el consumo es la capacidad de desechar. Pero ese presente instantáneo y continuo, lleno de destellos, jamás llegara a ser luz, pues la irrupción irracional de puntos de inflexión aunque este “in” no es del todo contundente, sino sólo genera infinidad de heridas cutáneas de momentos que seguirán doliendo. Los productos listos y los vínculos que luego se hacen pedazos y son desechados, apuestan al olvido y consecuentemente, a la idiotez. La propuesta: prescindir de las salidas fáciles, los argumentos sacados de la manga y ser concientes que sólo la complejidad logra transformaciones profundas.
Si tú eres de los que buscan todo digerido y empacado para llevar como lunch, pasa por tu cajita feliz y prende el televisor en el canal de las estrellas. ¡Next!
PD: Inspirada en Bauman, su ambivalencia y desamparo.

¡Los amo!

Comentarios

Araceli Ledesma ha dicho que…
Cierto es que la cultura del NEXT nos ha invadido y ha hecho que todo sea desechable. La culpa no es nuestra sino de esas tendencias nuevas que por ejemplo, nos invitan a limpiar el closet para que la energía negativa se aleje y todo fluya...aún así me he resistido a tirar los jeans favoritos que se caen de viejos, las cartitas y regalitos de los amores de infancia, el atuendo mini de la escolta y muchas otras cosas más. Sin embargo, creo que NEXT es la palabra mágica en cuestiones del amor...ahí sí me he dejado llevar por ella para olvidar los desencantos y dar paso, como en el super, al siguiente. Un abrazo!!!
Unknown ha dicho que…
El desapego es de los temas más complicado.
Besos